¿Qué significa la palabra Elam?
La palabra «Elam» se refiere a una antigua civilización y reino que existió en la región de lo que hoy es Irán occidental. Los elamitas, como se les llama a los habitantes de esta civilización, fueron mencionados por primera vez en fuentes históricas alrededor del tercer milenio a.C. y florecieron como una potencia regional entre el segundo milenio a.C. y el primer milenio a.C.
El nombre «Elam» probablemente se deriva de la palabra en acadio «Elamtu», que significa «tierra alta». Elam se situaba en una zona montañosa y fértil en el sudoeste de Irán, y su geografía influyó en su historia y cultura únicas.
¿Qué país es actualmente Elam?
Actualmente, no hay un país llamado Elam, ya que la civilización y el reino elamita desaparecieron hace mucho tiempo. La región donde se encontraba Elam, que ahora es Irán occidental, se conoce como Juzestán, y es una provincia de la República Islámica de Irán. La zona es rica en recursos naturales, incluyendo petróleo y gas natural, y tiene una larga historia que se remonta a la antigüedad. La región de Juzestán ha sido habitada por una serie de grupos étnicos y culturas a lo largo de los siglos, y ha sido objeto de conflictos y tensiones políticas en la época moderna.
¿Dónde estaba Elam?
Elam se encontraba al este de Mesopotamia, separado de esta por los montes Zagros. Ahora bien, es difícil dilucidar la extensión del territorio que llegaron a ocupar los elamitas, más si cabe teniendo en cuenta la escasez de excavaciones arqueológicas en algunas zonas, y que el territorio ocupado por estos variaría a lo largo del tiempo.
En cualquier caso, las actuales regiones del Juzistán y Luristán estuvieron ocupadas durante el III y II milenio a. C. por los elamitas sin ninguna duda.
¿Cuál era el dios de los elamitas?
La religión elamita era politeísta, lo que significa que adoraban a varios dioses y diosas. El panteón elamita estaba influenciado por las creencias religiosas de las civilizaciones vecinas, incluyendo la mesopotámica y la persa.
Uno de los dioses más importantes en la religión elamita era Inshushinak, que era el dios patrón de la ciudad de Susa, la capital del reino elamita. Inshushinak era considerado el señor de los dioses y se le asociaba con la agricultura, la fertilidad, la guerra y la justicia.
Otros dioses importantes en la religión elamita incluían a Humban, dios de la guerra y la caza; Kiririsha, diosa de la sanación y la protección; Napirisha, dios de la agricultura y la cosecha; y Pinikir, dios de la muerte y el inframundo.
Aunque la religión elamita ha desaparecido hace mucho tiempo, algunos de los dioses y diosas mencionados anteriormente han sido identificados y estudiados a través de inscripciones y textos antiguos, así como de la arqueología.
¿Cuál es el idioma de los elamitas?
El idioma hablado por los antiguos elamitas se conoce como «elamita». Era una lengua aislada, lo que significa que no estaba relacionada con ninguna otra lengua conocida en su época. El elamita se escribía utilizando un sistema de escritura cuneiforme, similar al utilizado por los sumerios y otros pueblos mesopotámicos.
El elamita era una lengua importante en la región del Creciente Fértil durante el segundo y el primer milenio a.C., y era hablada en el reino de Elam y en las regiones circundantes. Aunque la lengua se extinguió hace mucho tiempo y ya no es hablada, algunos textos antiguos en elamita han sobrevivido, permitiendo a los lingüistas y los estudiosos estudiar la lengua y la cultura de los antiguos elamitas.
Historia del Antiguo Elam
La historia del antiguo Elam se remonta al tercer milenio a.C. La región de Elam, que abarcaba gran parte de lo que ahora es la provincia iraní de Juzestán, fue habitada por una serie de culturas y grupos étnicos, incluyendo a los elamitas, que establecieron un reino poderoso en la zona.
Los elamitas se convirtieron en una fuerza importante en la región durante el segundo milenio a.C., cuando comenzaron a establecer relaciones comerciales y diplomáticas con los vecinos mesopotámicos. Los elamitas también se enfrentaron en varias guerras con los asirios, los babilonios y otros poderes mesopotámicos.
En el siglo XII a.C., los elamitas conquistaron la ciudad de Babilonia y establecieron su control sobre gran parte de la región mesopotámica. Sin embargo, su dominio fue de corta duración, ya que los asirios, que habían sido vencidos por los elamitas, se recuperaron y recuperaron su poder.
A lo largo de su historia, los elamitas hicieron importantes contribuciones a la cultura y la tecnología de la región. Desarrollaron un sistema de escritura cuneiforme y crearon obras de arte y arquitectura impresionantes. También eran conocidos por su habilidad en la metalurgia y la cerámica.
A partir del primer milenio a.C., el poder de los elamitas comenzó a declinar, y finalmente fueron conquistados por los persas aqueménidas en el siglo VI a.C. A pesar de su desaparición como una entidad política, la cultura y la historia de los antiguos elamitas han dejado una marca duradera en la región y en la historia de la civilización humana.
Reyes elamitas
El reino de Elam tuvo una larga historia, durante la cual varios reyes gobernaron la región. Algunos de los reyes elamitas más destacados incluyen:
- Puzur-Inshushinak (c. 2050 a.C.): Uno de los primeros reyes conocidos de Elam, fundó la ciudad de Inshushinak y estableció el control elamita sobre gran parte del suroeste de Irán.
- Shilhak-Inshushinak (c. 1900 a.C.): Uno de los reyes más importantes de Elam, conquistó la ciudad de Susa y estableció la ciudad como capital del reino. También llevó a cabo una serie de campañas militares contra los vecinos mesopotámicos, incluyendo los sumerios y acadios.
- Kutik-Inshushinak (c. 1400 a.C.): También conocido como Kudur-Enlil, lideró una invasión exitosa de Babilonia y fundó la dinastía casita, que gobernaría Babilonia durante varios siglos.
- Untash-Napirisha (c. 1300 a.C.): Uno de los reyes más importantes de la dinastía de Shutrukid, construyó el famoso zigurat de Chogha Zanbil y expandió el control elamita en la región.
- Shutruk-Nahhunte (c. 1150 a.C.): Conquistó gran parte de Mesopotamia, incluyendo la ciudad de Babilonia, y saqueó el templo de Marduk. También tomó prisionero al rey babilónico y se llevó el Cilindro de Ciro, un importante documento histórico.
- Tepti-Humban-Inshushinak (c. 700 a.C.): Último rey elamita conocido, que gobernó en un momento en que el reino de Elam estaba en declive y bajo amenaza de invasión por parte del Imperio Asirio.
Estos son solo algunos de los reyes más destacados de la historia de Elam, que tuvo una influencia importante en la región del Creciente Fértil durante varios milenios.
¿Cómo era la sociedad elamita?
La sociedad elamita era una sociedad estratificada, con una clase gobernante y una clase campesina. Los elamitas también tenían una fuerte influencia de las culturas mesopotámicas, con las cuales mantenían relaciones comerciales y diplomáticas.
La clase gobernante elamita estaba compuesta por el rey, la nobleza y los sacerdotes. El rey era el líder del estado elamita y era considerado un gobernante divino. La nobleza estaba formada por los líderes locales y los oficiales del gobierno, que ayudaban al rey en la administración del reino. Los sacerdotes, por su parte, eran responsables de los templos y la religión del reino.
La clase campesina era la mayoría de la población elamita y estaba compuesta por granjeros, pastores y artesanos. La mayoría de los campesinos vivían en pequeñas aldeas agrícolas y dependían del cultivo del trigo, la cebada y otros cultivos para su subsistencia. También eran hábiles en la cerámica, la metalurgia y otras artes y oficios.
La esclavitud también era común en la sociedad elamita, y los esclavos eran considerados propiedad de sus dueños. Los esclavos eran utilizados para trabajos manuales, como la agricultura y la construcción.
La religión en la sociedad elamita era politeísta, con una variedad de dioses y diosas adorados en el reino. Entre los dioses más importantes se encontraban Inshushinak, el dios de la ciudad de Susa, y Napirisha, el dios de la guerra. Los sacerdotes tenían un papel importante en la religión elamita, y se encargaban de realizar sacrificios y rituales en honor a los dioses.
En general, la sociedad elamita era una sociedad jerarquizada y estratificada, con una clase gobernante poderosa y una mayoría campesina que dependía de la agricultura y otros trabajos manuales para sobrevivir.
Principales ciudades de Elam
Elam fue un reino antiguo que se desarrolló en el suroeste de Irán, y sus principales ciudades incluyen:
- Susa: también conocida como Shush, fue la capital de Elam y una de las ciudades más importantes del antiguo Oriente Próximo. Fue fundada en el tercer milenio a.C. y continuó siendo un importante centro político y cultural hasta la época del Imperio Persa.
- Anshan: también conocida como Anzan, fue otra importante ciudad elamita y un centro de la producción de metales. La ciudad se encuentra en el sur de Irán y fue una importante fuente de hierro y otros metales para la región.
- Dur-Untash: también conocida como Chogha Zanbil, fue una ciudad sagrada elamita construida por el rey Untash-Napirisha en el siglo XIII a.C. Es conocida por su impresionante zigurat, uno de los mejores ejemplos de arquitectura elamita que ha sobrevivido hasta nuestros días.
- Madaktu: fue una ciudad elamita en la provincia de Fars en el suroeste de Irán. Fue fundada en el tercer milenio a.C. y se convirtió en un importante centro comercial y cultural en la región.
- Jiroft: fue una ciudad importante durante el período Elamita temprano, aproximadamente entre el 3000 y el 2000 a.C. La ciudad se encuentra en la provincia de Kerman en el sureste de Irán y es conocida por su cerámica y otros productos artesanales.
Estas son algunas de las principales ciudades del antiguo reino de Elam, que desempeñaron un papel importante en la historia y la cultura del antiguo Oriente Próximo.
El arte de Elam
A pesar de que son escasos los objetos artísticos pertenecientes a la cultura elamita que han llegado hasta nuestros días trataremos de hacer un breve análisis del arte en Elam. Además la mayoría de objetos proceden de la excavación de Susa con lo que la información es todavía más sesgada si cabe.
Por los objetos procedentes de Susa podemos pensar que los elamitas eran excelentes alfareros capaces de realizar bonitas vasijas pintadas con motivos geométricos o zoomorfos.
También eran diestros en el trabajo del metal, llegando incluso a dominar la técnica de la cera perdida. Un ejemplo del arte en metal son los famosos bronces del Luristán. En cuanto a las estatuas son un bastante finas, aunque con el tiempo recibirán la influencia de la Babilonia casita.
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Fuentes y referencias:
Aquí te dejo algunas sugerencias de libros sobre el antiguo Elam que podrían interesarte:
- «Elam: Surwest-Iran in the Bronze Age» de D. T. Potts – Este libro es una exploración completa y detallada de la civilización elamita desde su surgimiento hasta su declive. Incluye una discusión sobre la historia política, la cultura, la religión y la sociedad de Elam.
- «Elam and Persia» de Javier Álvarez-Mon – Este libro explora la relación entre Elam y Persia y su influencia en la historia y la cultura del antiguo Oriente Próximo. Incluye una discusión sobre la política, la economía y la cultura de ambas civilizaciones.
- «Elamite and Achaemenid Periods» de J. Wiesehöfer – Este libro es una introducción a la historia de Elam desde la época elamita temprana hasta la conquista persa en el siglo VI a.C. Incluye una discusión sobre la política, la economía, la sociedad y la cultura de la región.
- «The Archaeology of Elam: Formation and Transformation of an Ancient Iranian State» de D. T. Potts – Este libro examina la arqueología de la región de Elam y ofrece una visión detallada de la cultura material, la arquitectura y las prácticas funerarias de la civilización elamita.
- «Elam and Babylon: A Study of Ancient Oriental Society» de R. Ghirshman – Este libro es un estudio de la sociedad y la cultura del antiguo Oriente Próximo, con un enfoque particular en las civilizaciones de Elam y Babilonia. Incluye una discusión sobre la política, la religión, la economía y la sociedad de ambas civilizaciones.